Como en todas las reservas naturales del planeta, algunos recursos son verdaderos tesoros escondidos y selectos solo para unos pocos. Así es playa Mendieta, una de las últimas playas que se encuentran en el territorio de la Reserva Nacional de Paracas. Conforma una pequeña caleta de cerca de dos kilómetros de arena blanca, en forma de media luna, con agua semi transparente y tonos verdes y turquesas.
Salpicada de formaciones rocosas, playa Mendieta es la naturaleza pura, porque no hay ningún tipo de servicios. Conocerla implica una responsabilidad mayor, porque se ha mantenido ajena a la mano del turismo masivo. Es necesario llevar todo lo que se va a consumir, no comer en la playa ni dejar ninguna basura. Se puede caminar por la arena, tomar el sol, y disfrutar de un baño de mar en un agua absolutamente pura.
La playa Mendieta está localizada a 22 kilómetros desde el punto de control Santo Domingo, la entrada a la Reserva Nacional de Paracas. La carretera no está afirmada y para llegar a ella se requiere un vehículo de doble tracción. La mejor forma de llegar es a través de un tour que se adquiera en cualquiera de las empresas turísticas que operan en el muelle El Chaco de Paracas. El precio puede oscilar porque no es un tour muy común.
Si va por cuenta propia conduciendo desde Lima, tome la autopista Panamericana Sur con rumbo sur, desde cualquiera de los accesos como el trébol de la avenida Javier Prado. Paracas está a 260 kilómetros, y el recorrido se hace por una vía de peajes, de seis canales, perfectamente pavimentada y señalizada. Desde Paracas, tome la ruta del Puerto General San Martín, y tome el desvío a la izquierda desde el punto de control Santo Domingo.
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