De los muchos tesoros escondidos que tiene la Reserva Nacional de Paracas para el visitante, destaca playa Lagunillas. Es una de las más visitadas y concurridas, porque el acceso es muy simple y porque está próxima a un área de restaurantes de la caleta de pescadores de Lagunillas, así como hay un mirador y la posibilidad de subir al acantilado para tener espectaculares vistas de toda la bahía de Lagunillas.
Una cosa diferencia a la playa Lagunillas del resto de las de la península de Paracas: su arena es oscura, como la de la playa Atenas. A un lado, pasando la zona de los restaurantes, un pequeño cabo que la limita forma otra playa, pequeña y reservada, llamada Lagunillas de las Algas, por la gran cantidad de estas plantas que se pueden encontrar en la orilla.
Llegar a la playa Lagunillas es muy fácil, porque es una de las más conocidas de Paracas. Si viaja desde Lima, debe conducir por la autopista Panamericana Sur, con rumbo sur, desde cualquier punto de intersección desde la ciudad, como la avenida Javier Prado. La distancia hasta Paracas es de 260 kilómetros, que se recorre en unas tres horas. La vía está perfectamente pavimentada y señalizada.
Desde Paracas hay que continuar por la vía del Puerto General San Martín, que es la misma que ingresa a la Reserva Nacional de Paracas. Nueve kilómetros después del punto de control Santo Domingo, se debe tomar la vía de la izquierda, por cerca de 15 minutos, hasta el desvío hasta la playa Lagunillas. Hay un área de estacionamiento junto a los restaurantes.
Si va por cuenta propia sin auto, la mejor forma de llegar desde Paracas es a través de cualquiera de las empresas de turismo. La mayoría ofrecen un tour doble, que incluye el recorrido por las islas Ballestas y luego por las playas que estén abiertas. El precio puede oscilar entre los 30 y los 50 soles por persona, y la ventaja es que tienen transporte de ida y vuelta.
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