Si hay un símbolo que define a la ciudad de Ica es el oásis de la Huacachina, el más famoso del Perú. Ubicado muy cerca de la ciudad, es una laguna de aguas verdes, rodeada de vegetación que contrastan con el austero paisaje de altísimas dunas de arena blanca, que se torna amarilla con la luz del sol. 

Al oeste de la ciudad de Ica, la Huacachina es uno de los atractivos turísticos principales de la ciudad y una de las excursiones preferidas de los limeños en fines de semana. Un bulevar lo bordea, en el que se intercalan diversas opciones para el alojamiento en medio de las dunas. La zona, además, está protegida por el Estado Peruano. 

Recorrer las dunas, hacer sandboard y recorridos en vehículos tubulares de doble tracción, llamados areneros, es posible en la Huacachina. Además, se puede hacer un recorrido por la ciudad de Ica, incluyendo el santuario del Señor de Lurén y la plaza de Armas de esta ciudad, centro económico de un productivo valle dedicado a la agroexportación. 

¿Qué hacer en la Huacachina? ¿Por qué visitarlo?

• Recorrer la laguna. Hay un paseo arbolado por toda la orilla de la laguna de la Huacachina, y se puede alquilar botes de pedal. 
• Excursión de los tubulares. Los areneros son vehículos especialmente preparados para recorrer las dunas alrededor del oásis. Es un paseo divertido con saltos en la arena, para el cual hay que usar casco y cinturones de seguridad. 
• Sandboard. Hay alquiler de tablas para deslizarse desde la cima de las dunas pendiente abajo. Quienes las rentan brindan las recomendaciones de seguridad. 
• Visitar Ica. La ciudad está muy cerca de la Huacachina y vale la pena visitar la plaza de Armas y la catedral, localizada en una de las esquinas de la plaza. 
• Conocer el santuario del Señor de Lurén. El santuario del Señor de Lurén está localizado a unas nueve cuadras al sur de la plaza de Armas de Ica. El templo resultó dañado en el terremoto de Pisco de 2007, y fue reconstruido, ampliando su capacidad, siendo consagrado en 2019. 
• Disfrutar la gastronomía. Ica tiene sus platos típicos y en los muchos restaurantes alrededor de la Huacachina se pueden degustar, como por ejemplo la morusa de pallares o la carapulcra. 
• Visitar el parque de las Brujas. En la zona de Cachiche, al sur de Ica, está un parque temático dedicado a las Brujas de Cachiche, un grupo de hechiceras cuyos poderes son conocidos en todo el país.

¿Cómo llegar a la Huacachina?

El oásis de la Huacachina está localizado al oeste de la ciudad de Ica, e integrado al urbanismo de la ciudad. Desde Lima, la mejor opción es tomar un autobús de Perú Bus, por 35 soles el boleto, que cubre el trayecto en unas cuatro horas. Las unidades salen de su terminal en la avenida México y de un paradero próximo al puente Atocongo, en la Panamericana Sur. 

Desde Ica, un taxi puede cobrar unos seis u ocho soles por el trayecto hasta la laguna. Muchos hoteles y alojamientos ofrecen traslado desde el centro de Ica hasta la Huacachina donde están sus instalaciones. 

Si conduce desde Lima debe tomar la Panamericana Sur en cualquiera de los puntos de acceso, y seguir con rumbo sur durante 234 kilómetros hasta la ciudad de Pisco. Se paga peaje y la autopista de cuatro canales está en perfecto estado de tránsito y señalización. En esta ciudad se sigue con rumbo sur, evitando el desvío a Paracas, y se continúa por otros 70 kilómetros aproximadamente. 

Recomendaciones

• Usar protector solar, gorros y mangas largas. Así podrá protegerse del sol en los alrededores del oásis
• No se pierda el tour de los tubulares. Los areneros están diseñados para remontar las altas dunas de arena, y se trata de una experiencia única al estar rodeados solo por inmensas colinas de arena sin vegetación. 
• Disfrute las tejas y chocotejas. Son un postre que forma parte de la identidad de Ica, y van rellenas con nueces, frutos secos o pecanas con manjar blanco. 
• Pruebe la cachina. Esta bebida es un mosto puro de uva muy popular en el valle vitivinícola de Ica, fermentada por muy pocos días. Se sirve helado y refresca mucho la sed.